Estando en Argentina, Daniel Ferreyra no podía creer que su equipo César Vallejo siga cayendo en la tabla. El ‘Canguro’ regresó a Trujillo y ayer entrenó con sus compañeros en el colegio ‘San José Obrero’ con una sola idea: no descender.
“Es importante que todos estemos juntos, más en este momento crítico. Yo tenía muchas ganas de venir pare empezar de nuevo a compartir vestuario con chicos. Me pican las manos por tapar, estoy como loco. No creo que descienda otra vez (como con José Gálvez). De ninguna manera va a pasar”, aseguró.
Por ahora, Ferreyra solo podrá dar apoyo moral ya que su vuelta a las canchas prácticamente se dará para el otro año. “Me estuve recuperando en Argentina, en River Plate, para ganar movilidad en el tobillo y ya la parte física la continuaré acá. Felizmente, mi recuperación ha ido mejor de lo que esperaba”, contó.
El ‘Canguro’ viajó solo a su país natal y ahora está feliz por reencontrarse con su esposa e hijos: “Estuve mal por muchos aspectos. Extrañaba a mi familia. Me fui solo y viendo al equipo en situaciones malas. No me lo esperaba. Ahora estoy acá y espero que mejoremos”.
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