La frecuencia: CMD
Con relatos de José Carlos Armendáriz y comentarios de Flavio Maestri llegó la transmisión del partido jugado en el Mansiche. El narrador, que ha mejorado bastante en la modulación de su voz, anduvo sumamente atento a los resultados de otras canchas en la medida en que el Twitter de DeChalaca.com los iba reportando. En tanto, Maestri, quien también se asienta cada vez más como comentarista, siempre está especialmente atento al desempeño de los delanteros y por ello hizo énfasis en el buen partido hecho por Roberto Jiménez.
La pizarra: Experimentos chinos
El 'Chino' Víctor Rivera sorprendió al innovar con una defensa de tres en los primeros instantes del partido: Requena por derecha, Muente de líbero y De Castro por izquierda. Delante colocó una línea de cuatro, más sueltos Leguizamón -en opaca tarde- y Cazulo para crear y en punta un solitario Carranza que navegó en la orfandad casi toda la tarde. Luego quiso trocar a un sistema más ofensivo, pero los volantes se perdieron en intentos individuales y la alimentación a Carranza, como se dijo, fue casi nula. En la visita, ausente nuevamente Merino -que al parecer se lo esté guardando para la Copa América despierta muchas elucubraciones, agravadas con la salida de Lisi-, el 'Gato' Espino propuso el 4-2-3-1 de los mejores partidos del 'Poderoso del Alto Mayo' y mal no le fue. Pero Olcese no es Merino y puede conducir, pero no desequilibrar. Por eso, a diferencia de lo que ocurrió con el 'Poeta', el peso diferencial de Unión Comercio estuvo en las veces que Jiménez se animó a causar zozobra con remates complicados.
Los cambiazos: Corrección que no corrige
Visto el desacomodo de Vallejo en el primer tramo del partido, Rivera varió el sistema con el ingreso de Iriarte por Requena, para así retroceder a Ugaz y Reyes y volver al esquema de tres lanzadores que le funcionó en Moquegua. Pero el aceptable partido del 'Chemo' Ruiz y el enredo de Leguizamón bastaron para neutralizar esos arrebatos y lograr que el local no hiciera mayor daño en casi 75' de juego. Solo con las entradas de Recalde -quien acompañó a Carranza- y, luego, de Vergara, el 'Poeta' cambió algo de cara al gol. En la visita, en tanto, el 'Gato' Espino lució algo reacio a hacer movidas, hasta que se animó a sumar minutos en la Bolsa con Jaime Vásquez y, sobre el final, a restarle minutos al partido con Alan Rodríguez.
El capo: Horacio Calcaterra
Sin Merino en el campo, el argentino es el que pone la cuota distinta en el equipo de Nueva Cajamarca. En el primer tiempo, cuando el partido estaba en la modorra, él rompió ese trance con un par de disparos que pasaron cerca del arco de Ferreyra. Luego, fue el que más trajinó y corrió, hasta acabar algo acalambrado al ser sustituido por Alan Rodríguez en tiempo de descuento.
El extraviado: Sidney Faiffer
Un poco por desgano pero al parecer sobre todo por no haberse podido ubicar cabalmente en medio de los cambios de esquema que practicó Vallejo, Faiffer estuvo algo perdido y lejos de su nivel esta tarde de sábado en el Mansiche. Ni marcó ni condujo; ni siquiera intentó con sus habituales disparos desde fuera. Algo desconocido el buen volante poeta.
Jailaits
Bostezos rotos: El primer tiempo fue monótono y solo cambió con los referidos disparos de Calcaterra a partir de los 27'. Pero la más clara llegó a los 32' vía un tiro libre de Jiménez que Ferreyra sacó con una mano. Así, Unión Comercio fue el que más asustó pese a que el local tenía mayor posesión de la pelota.
Para romper el hielo: El segundo tiempo no vio variar demasiado las acciones, aunque las ocasiones mayores siguieron siendo de la visita. Las cosas, no obstante, pudieron revertirse a los 75': Jeickson Reyes encontró un balón en el borde del área y le pegó con comba hasta estrellar su tiro en el travesaño. Eso desató un nuevo partido para el tramo final.
Rush de toma y daca: El desequilibrio llegó a los 81': Ugaz trabó ligeramente a Talledo en la boca del área poeta, y aun cuando la acción no fue aparatosa era falta al fin y al cabo. Jiménez, con derecha, cobró en forma magnífica para el 0-1. Vallejo, herido en el alma, se lanzó a buscar el empate sin ideas pero con mucho coraje y así lo consiguió. Cuatro minutos después, apenas, Vergara recibió un pase de lateral, guapeó y sacó el centro para que Recalde, de cabeza, la mandara al fondo para sellar el empate en un partido que de haberse jugado con la misma intensidad de los 10' finales habría permitido contar una historia mucho más emotiva
dechalaca.com
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